Cusco un paso adelante: Incorporación del enfoque de género en la actualización de la ERFCC
En los últimos cuatro años la región Cusco emprendió un camino sostenido para incorporar el enfoque de género en las políticas climáticas, que ha incluido el proceso de la actualización de la estrategia regional con perspectiva al 2050 en una clara muestra de voluntad política para integrar a mujeres y hombres en la acción climática territorial.
De esta forma, el Consejo Regional de Cambio Climático de Cusco (CORECC) ha dado un paso adelante al validar una metodología que ha contribuido a visibilizar el impacto diferenciado por género de la crisis climática y la importancia de que estas afectaciones diferenciadas entre mujeres y hombres sean tomadas en cuenta en la actualización de sus políticas vigentes.
Los avances se compartieron en un desayuno de trabajo realizado el miércoles 7 de agosto en el que participaron las instituciones públicas y organizaciones de sociedad civil que integran el CORECC, instancia que tuvo la responsabilidad de impulsar y conducir la actualización al 2050 de la Estrategia Regional Frente al Cambio Climático (CORECC) en el marco de las disposiciones del ente rector en la materia, el Ministerio del Ambiente.
EL Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán, que es parte del CORECC y preside la Mesa de Género, una de las once que funcionan al interior del espacio, propició la jornada con la finalidad de socializar los avances y los desafíos de cara a lo que será la futura implementación de la ERFCC en las diferentes provincias y distritos del Cusco.
La bienvenida estuvo a cargo de Vilma Ruiz, secretaria técnica del CORECC y la exposición del proceso de la bióloga Carmen Giusti, quien estuvo acompañando el recorrido de los últimos años.
“Se han logrado importantes avances en la incorporación del enfoque de género en las diferentes fases y etapas del proceso de actualización de la ERFCC; sin embargo, podría ser más integral y profunda de contar con mayor sensibilidad en las diferentes instituciones públicas y privadas, y datos desagregada por género. Es un desafío”, sostuvo Giusti.
Asumimos como lección -remarcó- que la incorporación de enfoques transversales, en especial el de género, requiere un esfuerzo de análisis que se debe sumar a lo largo de todo el proceso porque el cambio climático impacta de manera diferenciada en mujeres y hombres y ambos pueden y deben aportar en su gestión.
Por su parte Katherine Pozo, del Programa de Desarrollo Rural del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán y titular de la Mesa de Género del CORECC, destacó el compromiso de las organizaciones de sociedad civil que en un esfuerzo conjunto con el Estado lograron que se escuchen las voces de las mujeres de las provincias para que sus experiencias, necesidades y propuestas frente a los impactos del cambio climático sean tomadas en cuenta.
En ese sentido, destacó el rol del colectivo MURCCA, Mujeres Rurales, Cambio Climático y Agricultura Familiar, integrando por instituciones de Cusco.
“Hemos dado un paso significativo en el camino que todavía tenemos por recorrer para que el enfoque de género sea un compromiso personal y una responsabilidad de quienes están en el servicio público, porque de esa forma las políticas, en este caso las climáticas, tendrán resultados positivos en los medios de vida y derechos de las mujeres y de los hombres”, subrayó.
En la contribución del CMP Flora Tristán al proceso por incorporar el enfoque de género en la actualización de la ERFCC se contó con el apoyo de la organización Diakonía, que también apuesta por un mundo justo, equitativo y sostenible.